El maestro Lázaro Valdés esculpió el Libro de Oro del Padre Félix Varela
En su taller de Hialeah hay cientos de bellas y famosas esculturas de los más cotizados artistas internacionales, como el maestro Fernando Botero de Colombia, pero hay una que tiene un significado muy especial para el escultor cubano Lázaro Valdés.
Se trata del “Libro de Oro del padre Félix Varela”, que es un compendio en espanol y en inglés de las mas celebres frases de este genio cubano, así como las del Apóstol y Prócer José Martí, el cual será pronto colocado en un sitio de honor en San Agustín en la Florida.
Lázaro Valdés, cada vez que pueda (ya que su tiempo es oro), se dedica con su pincel de acero y su martillo a labrar y perfeccionar esta increíble escultura, que también lleva en su base la estrella de la bandera cubana.
A marchas forzadas arregla y detalla minuciosamente las letras y el libro mientras el tiempo lo afana por que pronto viajará a Italia a llevar una serie de esculturas de las “gordas de botero” que estarán en un museo de Roma y en otros sitios emblemáticos de este país europeo.
Increíblemente Lazaro se formó empíricamente en este arte gracias a su talento porque religiosamente sabía que su destino estaba orientado hacia las Ciencias Geográficas, profesión que estudió en la Universidad de Pinar del Rio, donde se graduó con honores en 1990.
Poco a poco se fue apasionando por el mundo de la escultura y fue creando piezas de arte que con el correr del tiempo se fueron convirtiendo en cotizados monumentos que hoy le han dado la vuelta al mundo en ciudades emblemáticas de la historia pasada, contemporánea y moderna.
Su nombre, entonces, comenzó a escucharse en los corrillos de las más afamadas exposiciones y los artistas de talla mundial, como el maestro Fernando Botero, comenzando por fin a reconocerse su trabajo y sus obras maravillosas.
Ha ganado un sinnúmero de exposiciones pero, lo más importante, es que en cada trabajo le pone todo el alma y el amor a su arte, siendo reconocido ahora mismo con mucho orgullo en Europa donde colocará pronto en un museo la restauración de una colección de caballos en Praga.
Valdés, ahora mismo es dueño de Asubronze, una fundición y mantenimiento de esculturas, ubicada en el noroeste de Miami, donde trabajan todos sus familiares quienes se han especializado en la fabricación artesanal de esculturas monumentales y piezas decorativas de bronce.
Las técnicas de Valdés y su talento artístico, apoyado por sus trabajadores de taller, han hecho que la fundición sea tan reconocida como los talleres italianos de Pietrasanta, en la costa norte de Toscana, pero también aquí en Miami y en Estados Unidos.
Valdés le da gracias a la vida por llegar a este sitio del mundo artístico de la talla de esculturas ya que recuerda que sus antecesores sufrieron mucho trabajando al sol y al agua en los campos cubanos de Pinar del Río.
El padre de Valdés, quien siempre fue un agricultor, es ahora todo un maestro en hacer moldes: mientras que la hermana, tíos y primos son expertos en soldar piezas y fundir el bronce, entre otros. Todos trabajan al unísono tallando las ideas y el talento del maestro Lázaro.
“Esta obra para mi es especial y única. Porque las demás obras, lógicamente, son ordenadas por al creaciones de la gente que me encarga sus trabajos. En la obra del padre Varela ellos y yo ideamos con toda la información esta escultura”.
“Es algo alegórico. Es algo unico como la representación y recuerdo de ese genio que fue el padre Varela. Queríamos hacer algo que no fuera, simplemente, una placa fría y por eso se ideo el “Libro de Oro del padre Félix Varela” con sus más famosas frases”.
“En las páginas de este libro se dice todo. Esto es historia. Además todo es tan genial que contiene también las frases de Prócer y Apóstol José Martí que hicieron grande y poderosa la lucha patriótica en Cuba por la libertad y el orden”, destacó.
“Este será el mayor homenaje que se le ha rendido en toda su vida al padre Félix Varela. Porque junto con José Martí son las dos figuras mas emblemáticas de Cuba. Una caravana de personajes del exilio asistirá a la ceremonia en San Agustín”, reveló el arquitecto Jesús Permuy.
“Con este acto pretendemos que se haga prácticamente y se levante allí un santuario de peregrinación en San Agustín para el padre Varela. El maestro Rafael Consuegra y el pintor Delio Llebres también jugaron papel primordial para hacer realidad este santuario”, agregó Permuy,
Juan A. Nardo Fernández, presidente de Habana en el exilio, opinó que “La idea de este homenaje nació hace un ano y medio luego de una visita a San Agustín y de una conversación que tuvieron con el obispo Felipe de Jesus Estévez”.
A Lázaro se contactó por conducto del maestro Rafael Consuegra, quien es miembro del comité. También participaron “Chiquis” Temes de la Provincia de Santiago de las Vegas, Jesús Permuy presidente del municipio de la Habana, además de Llebres y Simon Sánchez, nuestro presidente nacional”, enfatizó.
Germán Acero E., periodista de LIBRE.
